Cómo arreglar la pantalla del móvil

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Una de las cosas que tenemos que hacer siempre que compramos un smartphone es buscarle una buena funda o carcasa para golpes e impactos, y también un protector de pantalla eficaz. Incluso haciendo esto, no estaremos completamente a salvo de que cualquier día, por accidente, la pantalla acabe dañada, agrietada o arañada. En este post vamos a ver qué se puede hacer para arreglar pantalla del móvil.

Como es lógico, la solución dependerá del tipo de problema que estemos experimentando con nuestra pantalla. A veces se trata de daños menores que no nos impiden seguir utilizando el teléfono; otras, en cambio, nos encontramos con que nuestro dispositivo se ha quedado fuera de combate. En cada caso hay que aplicar una solución diferente.

Una pantalla rota es algo que se ve a simple vista. Nos referimos a esas grietas que surcan la pantalla de nuestro teléfono y que, en los peores casos, nos impiden la visualización. Una situación realmente molesta y además muy preocupante. Pero también en estos casos hay diferentes grados. No es lo mismo tener una raya en la pantalla o un daño en la esquina que tener la pantalla completamente agrietada.

Cuando nuestro móvil ha recibido un golpe pueden pasar varias cosas: que se rompa la pantalla o que, a pesar de no mostrar grandes daños en su superficie, esta deje de funcionar de manera correcta. Veamos cómo actuar en cada situación:

Errores de software

tactil movil error

Muchos de los fallos que podemos encontrar en la pantalla de nuestro móvil están causados por un mal funcionamiento del software. Desde molestas manchas que nos impiden una correcta visualización hasta situaciones tan irritantes como que la función táctil se bloquee y la pantalla no responsa al contacto de nuestros dedos.

Un remedio «casero» y realmente eficaz para arreglar estos desajustes es reiniciar el teléfono. Es el método equivalente al «apagar y encender» que soluciona los quebraderos de cabeza en tantos dispositivos electrónicos. Si esto no resuelve el problema, habrá que probar con un hard reset o, en caso de que tampoco esto nos ayude, acudir al servicio técnico.

Así es como se hace un hard reset en Android:

  1. Primero apagamos el móvil.
  2. Después intentamos encenderlo de nuevo pulsando de forma simultánea el botón de encendido y el de bajar volumen.
  3. Así accedemos a las opciones internas de Android, usando los botones de volumen para movernos por las opciones de la pantalla. La que tenemos que elegir es la de «Wipe data and caché».

Y así se hace en un iPhone:

  1. Primero hay que descargar iTunes y, desde allí, elegir nuestro iPhone.
  2. En las opciones que encontramos está la de Restaurar iPhone, que podemos llevar a cabo sin necesidad de entrar en el dispositivo.

Pero antes de intentar un hard reset, y en previsión de que se puedan perder los datos que tenemos almacenados en nuestro teléfono, es recomendable hacer una copia de seguridad.

Calibración de pantalla táctil

Muchos de nosotros seguimos usando el móvil con normalidad incluso si la pantalla presenta pequeños daños. La razón es simple: el teléfono sigue funcionando bien y la pantalla responde. El problema surge cuando notamos que hay algunas zonas concretas que no podemos utilizar cuando pasamos nuestro dedo sobre ellas.

Estos pequeños fallos podemos resolverlos muchas veces nosotros mismos sin recurrir a terceros. En muchas ocasiones es suficiente con volver a calibrar la pantalla para que esta vuelva a estar cien por cien operativa. En Internet existen diversas aplicaciones pensadas para echarnos una mano en este tema concreto. Estas son algunas buenas opciones, para Android y para iOS:

Calibración de pantalla táctil
Calibración de pantalla táctil
‎CalibCat: Calibrate Screen
‎CalibCat: Calibrate Screen

Un pequeño truco antes de descargar las apps de calibración: muchas veces, el problema se soluciona simplemente quitando el protector de pantalla y colocándolo de nuevo con cuidado. Vale la pena probar este método antes de pasar a otras soluciones.

Sustitución de la pantalla

arreglar móvil

Cuando los daños se extienden a toda la pantalla y no se limitan a una pequeña grieta en la esquina o a algún daño menor, no queda más remedio que proceder a sustituir la pantalla. La situación ideal es que el daño se produzca durante el periodo de garantía de nuestro dispositivo. Si es así, lo único que hay que hacer es ir a la tienda donde lo compramos o contactar con el fabricante para que se haga cargo de la reparación.

Pero claro, muchas veces nos encontramos con esto fuera del periodo de garantía. Si es así, no tendremos más remedio que pagar por dicha reparación, ya sea a través del servicio oficial de la marca o en una tienda de reparaciones especializada.

Hay usuarios que se atreven a cambiar la pantalla del móvil por sí mismos. Esto sale bastante más barato, pues solo hay que comprar un panel nuevo de la pantalla y reemplazarlo por el que está dañado. Sin embargo, esto no es tan sencillo como parece y no está al alcance de cualquiera: hay que saber lo que uno se trae entre manos. Si no, estaremos perdiendo tiempo y dinero, para acabar acudiendo igualmente a una tienda de reparación de móviles.


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