Cuando un dispositivo comienza a mostrar síntomas de agotamiento, lo primero que debemos hacer antes de deshacernos de él es comprobar cuales pueden ser las posibles causas del bajón de rendimiento que está experimentado el dispositivo, ya sea un smartphone, tablet u ordenador, dispositivos gestionados por un sistema operativo.
En este artículos os vamos a mostrar cómo restablecer Windows 10 de cero, es decir, dejar el equipo como si acabáramos de instalar una copia limpia de Windows 10. Durante este proceso se borran todas y cada una de las aplicaciones que tenemos instaladas en el equipo, por lo que también es una excelente opción para hacer limpieza en el equipo.
Consejos a tener en cuenta antes de restablecer Windows 10
Copia de seguridad de los documentos
Aunque durante este proceso, Windows nos permite mantener una copia de todos los documentos que tenemos en nuestro dispositivo, eso no significa que no debamos hacer una copia de seguridad como media de precaución. Aunque este proceso no falla casi nunca, siempre puede te puede tocar a ti el 1% de las personas a las que le falla el proceso.
Realizar una copia de seguridad en Windows 10 es un proceso muy sencillo y rápido siempre y cuando tengamos establecida una estructura de archivos donde almacenamos todos los documentos que creamos, ya que tan solo tenemos que seleccionarla para hacer una copia de seguridad de los archivos para restaurarla posteriormente cuando hemos restablecido nuestra copia de Windows 10.
Si todavía no tienes establecida una estructura de archivos, y tienes repartidos los archivos por el escritorio, lo mejor que puedes hacer es copiar todos los documentos y carpetas a la carpeta Mis documentos y hacer una copia de seguridad en una unidad externa o siguiendo el proceso que os detallamos en este tutorial.
Revisar que aplicaciones tenemos instaladas
Antes de realizar este proceso y para evitar perder el tiempo una vez hemos restablecido nuestro equipo, es crear un listado con todas las aplicaciones que tenemos instaladas y que utilizamos habitualmente. Todas aquellas aplicaciones que antes de restablecer se encuentra instaladas pero que no utilizamos, no es necesario volver a instalarlas, ya que no nos harán falta y lo único que hacen es afectar, a la larga, al rendimiento de nuestro equipo.
Si las aplicaciones que hemos instalado las hemos comprado/descargado de la Microsoft Store, no hace falta que busquemos en nuestro cuenta de correo o en nuestras anotaciones el correspondiente número de licencia. Si no es así, junto al listado de aplicaciones que hemos creado, debemos extraer directamente de la aplicación el número de serie para evitar que tener perder el tiempo buscándola.
Otro aspecto que debes tener en cuenta entre las aplicaciones que utilizas habitualmente son las plantillas que hayas podido descargar de Office, los macros, pinceles o plugins de Photoshop, las extensiones del navegador que utilizas habitualmente… Además, si tu equipo tiene una tarjeta gráfica no integrada en la placa, debes tener la precaución de conservar los valores de configuración que tengamos, ya sea haciendo una captura o exportándolos a un archivo externo si nos ofrece esa opción.
La configuración de Windows también se eliminan
Uno de los aspectos negativos de esta opción que nos ofrece Windows la encontramos en que no se guarda la configuración que tenemos establecida en nuestro equipo. Esto se debe a que el motivo por el que nuestro equipo pueda estar funcionando mal se encuentre en la configuración de un driver, de la tarjeta gráfica, de la conexión bluetooth…
Pasos para Restablecer Windows 10
Una vez hemos tenido en cuenta todos los apartados que os he mostrado en los apartados anteriores, ha llegado el momento de comenzar a realizar los pasos necesarios para restablecer Windows 10. Lo primero que debemos hacer, es acceder a las opciones de configuración de Windows a través del atajo Tecla Windows + i.
A continuación, accedemos a las opciones Actualización y seguridad. Dentro de este apartado, en la columna de la izquierda, pulsamos en Recuperación.
Ahora nos dirigimos a la columna de la derecha y dentro de la sección Restablecer este PC pulsamos en el botón Comenzar.
A continuación, se mostrarán las dos opciones de recuperación que nos ofrece Windows 10:
- Mantener mis archivos: Elimina la configuración y las aplicaciones pero mantiene los archivos personales.
- Quitar todo: Elimina todos los archivos personales, las aplicaciones y la configuración.
En nuestro caso, aunque hayamos realizado una copia de seguridad de todos nuestros archivos, vamos a seleccionar la primera opción: Mantener los archivos personales, es decir los documentos, imágenes y vídeos que tenemos almacenados en nuestro equipo.
Si quieres eliminar cualquier rastro de tu equipo, tanto de aplicaciones instaladas como opciones de configuración y archivos, y queremos dejarlo como si instaláramos de cero Windows 10, debemos seleccionar la segunda opción: Quitar todo.
A continuación, se mostrará una nueva ventana donde se nos informa del proceso que vamos a realizar:
- Eliminar aplicaciones y programas
- Se eliminarán las opciones de configuración restaurando los valores predeterminados.
- Los datos personales relacionados con nuestro cuenta, incluyendo el número de licencia, se conservarán.
Si queremos comprobar cuales son las aplicaciones que se eliminarán, debemos pulsar el Lista de aplicaciones que se van a quitar. Si te fijas bien, en este listado no se muestran las aplicaciones que hemos instalado desde la Windows Store, si no las que hemos instalado de forma manual, es decir, que las hemos descargado desde una página web. Pulsamos en siguiente.
RECORDATORIO: Si no has realizado este listado que os he recomendado hacer, puedes hacer una captura de pantalla en enviártela por correo antes de iniciar el proceso.
Para iniciar el proceso de restauración pulsamos en Restablecer. No hay vuelta atrás, por lo que hay que tener en cuenta que si nos hemos saltado alguno de los pasos que os hemos indicado en este artículo, deberías volver atrás y hacerlo ya que el proceso no se puede interrumpir.
Una vez se inicie el proceso, proceso que durará más o menos tiempo dependiendo el número de aplicaciones que tenemos instaladas y de la potencia de nuestro equipo, no vamos a poder utilizar el equipo. Una vez finalice el proceso, se mostrará la pantalla de inicio de Windows, donde vamos a tener que escribir la contraseña de nuestra cuenta.
Al acceder, comprobaremos como todas las aplicaciones que teníamos instaladas se han eliminado de nuestro equipo y este se muestra como nuevo, como si acabáramos de instalar Windows 10 en nuestro equipo, pero con la ventaja de tener disponible todos los archivos personales que habíamos creado o almacenado en el equipo hasta el momento.