Es posible que estés dando vueltas a la idea de comprar router con tarjeta SIM. Se trata de un dispositivo que podemos utilizar para crear una red inalámbrica en un lugar en el que no existe una conexión directa a una línea telefónica. Un gadget muy práctico si lo que queremos es asegurarnos de que vamos a estar siempre conectados.
Muchas personas adquieren este tipo de routers cuando se tienen que ir de vacaciones a algún lugar sin conexión a Internet (la casa de pueblo, por ejemplo). Otros simplemente lo compran para tener una especie de red de seguridad cuando la conexión de casa o del trabajo fallan.
En este post vamos a explicar qué son exactamente estos aparatos, cómo funcionan y en qué tenemos que fijarnos a la hora de comprar uno. Se trata de una información muy interesante y útil, así que te animamos a seguir leyendo:
¿Cómo es un Router con tarjeta SIM?
Este tipo de routers son parecidos a los routers WiFi que tenemos en nuestros hogares, aunque con la particularidad de que estos disponen de una ranura en la que alojar una tarjeta SIM, una de esas tarjetas que usan los teléfonos móviles.
Es precisamente esta tarjeta la que se encarga de conectar el router a la red móvil, proporcionando de este modo conexión a internet sin necesidad de usar cables de ningún tipo.
Otra característica de los routers con tarjeta SIM es que cuentan con una antena externa. La función principal de esta antena es la de aumentar la recepción de señal de la red inalámbrica. Por otra parte, también facilita que el router pueda alcanzar una mayor velocidad de conexión y que esta sea más estable.
Por último, hay que mencionar que ciertos modelos de router con tarjeta SIM incorporan una función de firewall para proteger todos los dispositivos conectados a la red.
Configurar un Router con tarjeta SIM
Un router con tarjeta SIM se conecta a la red móvil a través de tecnologías inalámbricas como 3G ó 4G. Los datos necesarios para establecer dicha conexión (código de red, número de teléfono, datos de la cuenta, etc.) están contenidos en la propia tarjeta SIM.
Además de esto, casi todos los routers con tarjeta SIM cuentan con una toma Ethernet a través de la cual conectarse a dispositivos como un ordenador o un smartphone. La idea de esto es permitir a los usuarios compartir la conexión a Internet.
Para que todo funcione como es debido, lo más importante es colocar de forma adecuada la tarjeta SIM en el router. Estos son los pasos a seguir para hacerlo correctamente:
- En primer lugar, tenemos que comprobar que la tarjeta SIM que vamos a insertar es compatible con el router.*
- Después, hay que insertar la tarjeta en la ranura. En algunos casos, será necesario recurrir a la ayuda de un adaptador.
- A continuación, es necesario activar la tarjeta desde la interfaz de usuario. Para esto, es preciso hacer lo siguiente:
- Acceder con un navegador.
- Introducir la dirección IP del router.
- Ir al apartado de configuración y añadir los detalles de la tarjeta SIM (número de teléfono, el PIN, etc.)
Una vez completado el proceso anterior, hay que pasar a configurar el router, lo cual podremos hacer desde la pestaña de configuración del propio router. Desde allí vamos a poder cambiar los ajustes de conexión para que todo empiece a funcionar.
(*) Y, por supuesto, que la tarjeta SIM no está caducada. En ese caso, habrá que renovarla.
Qué saber antes de comprar
Una vez que nos decidimos a comprar un router con tarjeta SIM, nos encontramos con una amplia variedad de modelos y precios. Para elegir bien y no equivocarnos en nuestra elección, es importante fijarse en una serie de aspectos:
- Ante todo, debemos estar completamente seguros de que haya una buena cobertura de red móvil en el lugar donde pensamos poner el router. De lo contrario, el dispositivo no nos servirá de nada. Una buena manera de saberlo es realizar un test previo con nuestro teléfono móvil para comprobar la velocidad de subida y de descarga, así como la latencia.
- No menos importante es comprobar la compatibilidad del router con las bandas de frecuencia que suelen utilizar los principales operadores. Aunque generalmente es así, no está de más asegurarse para evitar desagradables sorpresas. Como norma, es recomendable optar por routers que, al menos, ofrezcan soporte para redes 4G.
- Es siempre mejor que el puerto WAN está separado de los puertos LAN. Eso garantiza que haya más puertos disponibles, multiplicando de este modo las posibilidades de conexión del router.
- Por último, hay que tener claro que el alcance de la nueva red creada será suficiente para nuestras necesidades. Esto dependerá de las características de nuestro domicilio o lugar de trabajo y del rango WiFi del router con tarjeta SIM. En todo caso, cuando haga falta, siempre se puede recurrir al uso de un amplificador WiFi.