La llegada de la Lenovo Legion Go S al segmento de consolas portátiles ha encendido un nuevo debate: ¿qué sistema operativo ofrece la mejor experiencia para jugar, SteamOS o Windows 11? Y la respuesta, tras semanas de comparativas y análisis por parte de la prensa especializada y la comunidad, parece más clara que nunca: SteamOS lleva la delantera en rendimiento y autonomía en la Lenovo Legion Go S.
Este cambio de paradigma no ha pasado inadvertido. Si hace un año la mayoría de jugadores asumía que Windows era la mejor —y a menudo la única— opción viable para jugar en PC, ahora los resultados demuestran que apostar por SteamOS aporta no solo una mejora palpable en la tasa de imágenes por segundo, sino una autonomía mucho mayor, algo clave para este tipo de dispositivos. Vamos a desgranar en detalle todas las pruebas, cifras y argumentos presentados por medios y expertos del sector.
SteamOS y la revolución portátil: un poco de contexto
SteamOS es el sistema operativo diseñado por Valve, basado en Linux, que hasta hace poco solo podía encontrarse en la Steam Deck. Sin embargo, en mayo de 2025 comenzó a estar disponible de manera oficial para otros dispositivos, entre ellos, la Lenovo Legion Go S, así como la Asus ROG Ally X. La posibilidad de elegir entre Windows 11 y SteamOS en la misma máquina era, hasta hace poco, impensable.
Mientras que Windows 11 es un sistema operativo concebido para una experiencia de escritorio generalista, SteamOS ha sido creado pensando en la eficiencia, la optimización de juegos y el mejor aprovechamiento del hardware en consolas portátiles. Valve ha puesto especial énfasis en eliminar procesos innecesarios en segundo plano, la telemetría intrusiva y el gasto energético superfluo. Todo ello sumado a su integración con Steam y Proton, una capa de compatibilidad que permite ejecutar juegos de Windows en Linux, ha posicionado a SteamOS como una alternativa real y competitiva.
Comparativa de rendimiento: cifras que hablan por sí mismas
El debate sobre si Linux puede superar a Windows en videojuegos lleva abierto años, pero la llegada de SteamOS de la mano de pruebas objetivas ha dado un vuelco: los resultados obtenidos en la Lenovo Legion Go S son abrumadores.
Según las pruebas de expertos como Dave2D y medios como ComputerHoy, El Chapuzas Informático, ITC.ua, Tarreo o HardZone, las diferencias en rendimiento entre SteamOS y Windows 11 son más que evidentes:
- Cyberpunk 2077: Con SteamOS, la Legion Go S logra 59 FPS con gráficos en bajo/medio, frente a los 46 FPS de Windows 11. Esto supone prácticamente un 30% de mejora.
- The Witcher 3: Salta de 66 FPS con Windows 11 a 76 FPS con SteamOS.
- Doom Eternal: Sube de 66 FPS en Windows 11 a 75 FPS con SteamOS.
- Helldivers 2: Gana 5 FPS de media con SteamOS, algo menos espectacular pero significativo.
- Spider-Man 2: Curiosamente, el único título en el que Windows 11 obtiene ligeramente más FPS (1 fotograma de diferencia, una diferencia anecdótica).
En cuanto a rendimiento, la mejora ronda entre un 20% y un 30% en títulos exigentes simplemente al cambiar de sistema operativo, sin modificar el hardware.
Consumo y autonomía: el gran salto adelante de
Si el incremento de rendimiento ya es un golpe duro para Windows 11, lo que sucede con la duración de la batería es aún más llamativo. Las pruebas reflejan que SteamOS puede doblar la autonomía de la Legion Go S en algunos juegos, y mejorarla en un 25% incluso en los más exigentes.
- Cyberpunk 2077: Jugar en SteamOS supone aproximadamente 30 minutos más de autonomía frente a Windows 11.
- Hades: En Windows 11, la consola se apaga tras 2 horas de juego; en SteamOS, aguanta unas impresionantes 4 horas y 17 minutos.
- Dead Cells: SteamOS permite más de tres horas y media extra de juego con una sola carga en comparación con Windows 11.
¿Cuál es la razón detrás de este salto? Por un lado, Windows 11 ejecuta múltiples procesos en segundo plano, incluidos servicios de telemetría y recopilación de datos, que cargan innecesariamente el sistema y consumen recursos constantemente. Por otro, SteamOS minimiza el consumo y optimiza las funciones de reposo y suspensión, permitiendo que la energía se dedique casi exclusivamente al juego.
Hardware y especificaciones: las diferencias están en el software
Ambas versiones de la Lenovo Legion Go S (SteamOS y Windows 11) cuentan exactamente con el mismo hardware, de modo que las diferencias solo pueden atribuirse al sistema operativo:
- Procesador AMD Ryzen Z2 Go (4 núcleos, Zen 3, gráficos RDNA 2).
- 16 GB de RAM y 512 GB SSD NVMe.
- Pantalla PureSight de 8 pulgadas WUXGA (1920 x 1200, hasta 120 Hz, VRR, 500 nits de brillo, 100% sRGB).
- Batería de 55 Wh.
Estos detalles refuerzan la idea de que el salto de rendimiento es una ventaja inherente a SteamOS, no al hardware específico. Además, la Legion Go S también disfruta de mejor disipación de calor y una ergonomía que facilita el juego prolongado.
Versatilidad: puntos fuertes y limitaciones de cada sistema
Uno de los grandes argumentos a favor de Windows 11 es su versatilidad: permite instalar aplicaciones, emuladores y juegos desde otras plataformas como GOG, Epic o Xbox Game Pass, algo que SteamOS, por defecto, no facilita en la misma medida.
En contrapartida, SteamOS está totalmente centrado en la experiencia de juego, con una interfaz optimizada para pantalla y controles portátiles. Además, se puede instalar en modo arranque dual, permitiendo que los usuarios elijan qué sistema operativo usar en función de sus necesidades o preferencias.
También hay que señalar que SteamOS todavía presenta ciertos desafíos de compatibilidad con algunos componentes y juegos fuera de Steam. Sin embargo, gracias al desarrollo de Proton y las continuas actualizaciones, la lista de juegos y hardware soportado aumenta cada día.
Actualización, precio y facilidad de instalación
La Lenovo Legion Go S se encuentra en el mercado por un precio atractivo (con la versión de Windows rondando los 579 euros, y la de SteamOS incluso más económica en algunos casos). El proceso de instalación de SteamOS, según la página oficial de Steam y múltiples análisis, consiste en desactivar el arranque seguro y cargar el sistema desde una unidad USB externa; una tarea sencilla para usuarios con cierta experiencia.
La posibilidad de elegir entre Windows 11, SteamOS o ambas mediante arranque dual permite que cada usuario adapte la consola a su perfil. Además, el almacenamiento NVMe garantiza que SteamOS cumpla los requisitos futuros de compatibilidad y actualizaciones, lo que allana el camino para una experiencia fluida y equivalente a la de la propia Steam Deck.
Comparación con Steam Deck y otras consolas portátiles
La Lenovo Legion Go S no solo compite con el modelo de Valve, sino que incluso puede superar a la Steam Deck en rendimiento a igual consumo energético. Por ejemplo, a 15 W, la Legion Go S rinde igual que la Deck, y al incrementar el TDP a 33 W, la Legion Go S la puede duplicar en rendimiento. Esto, sumado a una pantalla notablemente superior y controles más avanzados, convierte a la Legion Go S en una de las alternativas más atractivas del panorama actual.
Aun así, la Steam Deck sigue manteniendo una autonomía algo mayor en algunas circunstancias, pero pierde terreno en potencia bruta. Por otro lado, la Asus ROG Ally X y otras consolas del estilo están empezando a recibir soporte para SteamOS, lo que promete una competencia cada vez más reñida en este segmento.
Implicaciones para Microsoft, Valve y el futuro de los juegos en PC
La irrupción de SteamOS en consolas portátiles como la Legion Go S puede ser un revés importante para Microsoft. Muchos usuarios se ven obligados a usar Windows para jugar, pero si ahora un sistema operativo específico para gaming ofrece más FPS y una mayor duración de la batería, la migración puede ser cuestión de tiempo. Se calcula que, si la tendencia se mantiene, Windows puede perder millones de usuarios en favor de SteamOS o soluciones similares.
El mérito de Valve es doble: no solo logra ejecutar juegos originalmente diseñados para Windows, sino que lo hace a través de una capa de traducción (Proton) y aun así supera el rendimiento nativo de Windows 11. No obstante, hay que recordar que Windows sigue siendo el rey en compatibilidad de aplicaciones y en el universo de productividad, ofimática y multimedia.
Perspectiva de usuario y experiencia real
Más allá de los números, quienes han probado la Legion Go S con SteamOS destacan la sensación de fluidez, la ausencia de interrupciones por actualizaciones o procesos molestos de Windows, y el encendido casi instantáneo. Además, la gestión del modo reposo y la rapidez al volver al juego sobresale frente a la experiencia tradicional de Windows.
Por supuesto, para quienes prefieren un dispositivo polivalente, capaz de trabajar, navegar y jugar en cualquier plataforma, la opción de mantener ambos sistemas sigue siendo viable mediante arranque dual. Para los amantes del gaming puro, SteamOS se presenta como la mejor opción, ahora con el plus de poder instalarse en consolas más potentes o con mejores pantallas que la Steam Deck original.
La competencia en el terreno de las consolas portátiles de PC no ha hecho más que intensificarse. La irrupción de SteamOS en la Lenovo Legion Go S ha supuesto un salto cualitativo en lo que puede ofrecer un sistema operativo optimizado para jugar: mejor rendimiento, mayor duración de la batería y una experiencia de usuario más fluida. Con la posibilidad de elegir o incluso combinar ambos sistemas, los usuarios están más empoderados que nunca para sacar el máximo partido tanto a sus juegos como a su hardware portátil. Comparte la información para que otros usuarios conozcan sobre el tema.